El rechazo de una ficción. La máscara positivista del Tractatus
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| Formato: | Tesis |
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| Acceso en línea: | https://www.memoria.fahce.unlp.edu.ar/tesis/te.1409/te.1409.pdf |
| Resumen: | Desde su aparición en 1922, la principal obra escrita y publicada en vida por Ludwig Wittgenstein, el Tractatus Logico-Philosophicus, fue objeto de un interesante número de interpretaciones distintas e incluso incompatibles entre sí. Sin embargo, la lectura que marcó la historia posterior del Tractatus fue la que hicieron los positivistas lógicos del llamado Círculo de Viena. Estos filósofos, a partir de una interpretación en cierto modo tendenciosa de la obra, se apropiaron de su aparato lógico y sus principales tesis. A pesar de la contemporaneidad con la publicación del libro y de frecuentes contactos directos con el autor, dicha interpretación estuvo tensionada desde un principio por una serie de divergencias entre lo que pensaban los positivistas lógicos y lo que sostenía Wittgenstein. Si bien los primeros lo consideraban uno de los fundadores de la "visión científica del mundo" que ellos pregonaban, sobresalían en el Tractatus numerosos pasajes que planteaban problemas de envergadura para la filosofía positivista (como ejemplo paradigmático, la insistencia del libro en la importancia de lo "místico" y de "aquello que no se puede decir"). Esto no impidió, sin embargo, que el Tractatus fuera leído durante casi 50 años bajo las principales líneas de análisis que propuso el positivismo lógico. Esta suerte de "apropiación" de la obra empezó a mostrar deficiencias a partir de una serie de estudios profundos sobre el sistema lógico del Tractatus y sobre el contexto intelectual y social en el que Wittgenstein escribió su primera obra, dando lugar a interpretaciones diversas que se alejaron del legado positivista. En esta tesis repaso los principales puntos sobre los que se apoyaron los positivistas para "hacer suyo" el Tractatus, y el desarrollo de las críticas formuladas por autores como Allan Janik y Stephen Toulmin, Elizabeth Anscombe y Dominique Lecourt. Con respecto a este último, señalo que la propuesta de lectura del Tractatus como una obra polémica antipositivista permite una apertura por demás interesante de la obra wittgensteiniana hacia algunos desarrollos teóricos de la filosofía continental, considerada canónicamente como el reverso de la filosofía analítica. La propuesta contenida en el libro "El orden y los juegos" de Lecourt resulta un interesante intento de superar la distinción, aparentemente natural, entre la filosofía analítica y la continental Ever since it´s appeareance in 1922, the most important work written and published in life by Ludwig Wittgenstein, the Tractatus Logico-Philosophicus, has been the target of an interesting number of different and even incompatible readings. Nevertheless, the main interpretation that marked the Tractatus´s posterior history was the one proposed by the logical positivists of the Viena Circle. Theese philosophers, taking from a somewhat biased interpretation of the book, got hold of it´s logical apparatus and it´s main thesis. In spite of their frequent contact with the author, this interpretation was stressed from the start by a number of divergences between what the logical positivists thought and what Wittgenstein was apparently saying. Even though they considered him one of the founders of the "Scientific World-Conception", Wittgenstein enhanced in the Tractatus a certain number of problematic points of view for positivist philosophy (of wich the book´s insistence in the importance of the "mystic" and "that which can´t be said" is a paradigmatic example). This, however, didn´t change the fact that the Tractatus was read for almost 50 years under the main lines of analysis proposed by logical positivism. This kind of "aproppiation" of the Tractatus was gradually shaken by a series of deep studies on it´s logical system and the intelectual and social context in which Wittgenstein wrote his first book, leaving open a space for different interpretations that moved away from the positivist legacy. In this dissertation I review the main points which positivism relied on to "take over" the book, and the profound criticisms formulated to this interpretation by authors such as Allan Janik and Stephen Toulmin, Elizabeth Anscombe and Dominique Lecourt. Regarding the latter, I point out that his proposal to read the Tractatus as a polemic reaction to positivism results in an appealing opening of Wittgenstein´s work, specially towards some important developments in continental philosophy, traditionally considered as the reverse of analytic philosophy. In this sense, Lecourt´s proposal in L´Ordre et les jeux stands out as an interesting attempt to transcend the apparently natural distinction between analytic and continental philosophy |
| Descripción Física: | 106 p. |